Científicos Futuristas

Los Científicos del Futuro queremos que vosotros, habitantes de nuestro pasado, recuperéis en vuestro presente toda la dispersa y denostada obra del siempre iconoclasta Juan sin Credo

lunes, 23 de abril de 2012

Un tipo serio ( A serious man). Hermanos Coen


El film tras la mente

Tal vez se sepa que Juan sin Credo ha visto la película Un tipo serio (A serious man), escrita y dirigida por los hermanos Coen y protagonizada por Michael Stuhlbarg.

Quizá se opine que esta producción norteamericana se puede encuadrar en el género de la comedia negra y destaca esa visión de un humor retorcido que se ceba con el personaje principal incapaz de sobreponerse a su destino.

Acaso el pùblico piensa, al igual que Juan sin Credo, que ese final en el aire muestra la imposibilidad de luchar contra los designios trascendentes de la divinidad reflejados, en esta ocasión, en el seno de la comunidad judia del sureste americano a finales de los 60.

domingo, 22 de abril de 2012

A dios rogando y con el m-AZO dando


Dentro del panorama informativo de estas últimas semanas ha tomado enorme relevancia la vitalidad del sufijo aumentativo –azo. Existe un magnífico artículo de Gómez Torrego que nos habla de la capacidad de ponderación de este elemento sobre la base léxica a la que se añade.

Es en esta línea significativa de ese valor cuantificador, con un rasgo normalmente de carácter negativo, donde el Gobierno ha encontrado un filón para el regocijo de nuestra anquilosada lengua. De esta manera, han saltado a la palestra de la actualidad nuevos términos acuñados con esta partícula morfológica tales como aulazo, medicinazo o tasazo.

Palabras de nueva creación que marcan la tendencia de una intervención económica no declarada con el fin de saquear los maltrechos bolsillos de los ciudadanos y, lo que es aún más importante, efectuar una contrarrevolución ideológica que pretende fulminar el actual Estado del Bienestar por un modelo ultraconservador en el que las élites plutocráticas dominen a su antojo y capricho los recursos públicos que antaño estaban al alcance de la ciudadanía.

Una única doctrina, un solo credo; es decir la vuelta a esa España oscurantista de siempre que durante centurias ha transitado por el fondo del pozo de la inmundicia con respecto a otras naciones más desarrolladas.

Y podréis decir, mis más fieles y únicos lectores, que si soy un agorero, que si soy un demagogo o que si siempre estoy igual..., pero esta vez me gustaría contaros un hecho que me ha sucedido durante estos días en la plaza de un pueblo de cuyo nombre no quiero acordarme para que veáis como mi único fin consiste, únicamente, en transmitiros la realidad tal cual es.

Estaba la buena de mi madre hablando con su grupito de colegas, muchas de ellas también viudas, sobre el efecto que ha causado en su ánimo la aprobación del medicinazo. Sobre todo flotaba en el ambiente un clima de resignación. La respuesta unánime era: Se veía venir tras tantos años de derroche.

Sin embargo, el sentir general era de reproche y malestar ante las declaraciones de ese patán, que carece totalmente de sensibilidad y respeto hacia sus mayores, el secretario nacional de Sanidad y Asuntos Sociales del PP, José Ignacio Echániz que había vertido, con la impunidad que los caracteriza y sin ningún pudor ético, unas declaraciones demasiado desafortunadas acerca del copago refiriéndose a que solo les iba a suponer a los pensionistas un gasto de cuatro cafés al mes.

-Ese gachí es un pelanas Juan- me decía Angustias, una amiga de mi madre que la conozco desde que tengo uso de razón (es decir, desde nunca). -Pero si el doctor me prohibió el café hace  tres lustros porque me subía la tensión, lo que si me va a fastidiar es la pequeña paguita que le doy a mi nieto cuando viene a verme los domingos y me arregla algún desaguisado en la casa de los que siempre se encargaba el pobre de mi Esteban-

Pues yo a quien no trago es a la bruja escuchimizada y larguirucha esa presidenta de los dineros, Lagarta o Lagarde- comentaba Alfonso, recién incorporado al corrillo del sol primaveral formado por los jubilados- Mía tú que dice que el problema del país somos los pensionistas. Amos anda, tía pelandusca que seguro que gana un pastón pa luego gastárselo en perfumes de lujo. No nos tienen ninguna consideración sin Credo, ni respeto, ni ná. Toda la vida trabajando para recibir luego ese desprecio-

Se nos hacía tarde ya para comer y cogí a mi madre del brazo, despidiéndome afectuosamente de aquellos que tanto me han ayudado a ser el que soy.

Caminando los dos juntos hacia casa, iba meditando en silencio y mi madre me pregunto:

-¿En qué piensas ahora Juan, que te veo muy callado y tristón?-

-Intento acordarme madre de ese autor que decía que la salud moral de una civilización es equivalente al trato que reciben sus mayores y que visto lo visto nuestra sociedad está muy pero que muy enferma y de seguir por este camino no habrá ningún medicinazo que la cure-.


sábado, 21 de abril de 2012

Homer y Langley. Doctorow



La reseña con saña

Se oye comentar a la gente del lugar que Juan sin Credo ha leído la novela de E.L.Doctorow, Homer y Langley, traducida por Isabel Ferrer y Carlos Milla y publicada por la Editorial Miscelánea en abril de 2010.

Dicen que a Juan sin Credo esta lectura le ha vuelto -como toda la trayectoria narrativa anterior del autor- a mostrar una panorámica particular de la idiosincrasia americana del último siglo, bajo el prisma, esta vez, de los excéntricos hermanos Collyer que fueron capaces de almacenar, obsesivamente, toneladas de desechos en su finca de la Quinta Avenida durante años en una huida permanente hacia ninguna parte, alejados de todas las necesidades básicas para sobrevivir en una gran urbe como Nueva York.


martes, 17 de abril de 2012

Un fantasma con asma. Kalandraka


La reseñilla que más brilla




En verdad, en verdad, digan lo que digan, Juan sin Credo y su primogénito, Francisco I, El Grande, Príncipe de los Ángeles, han leído el álbum ilustrado titulado Un fantasma con asma, cuyo texto pertenece a Carmen Gil, las ilustraciones están dibujadas por la mano de Sarah Webster, publicado por la editorial Kalandraka, dentro de la colección libros para soñar, en abril de 2003.

Como imaginarán, los tan únicos y fieles lectores de la amplia y nihilista obra del tan idolatrado e irredento crítico, el argumento de este álbum ilustrado es más bien básico:

Ocurre que el médico Godofredo va a visitar a un fantasma de la misma ralea que la de Sir Simon de Canterville y le diagnostica el mal de la soledad, en vez de una hipotética enfermedad pulmonar. Para combatir esa dolencia del alma, el doctor le ofrece una dirección de un castillo habitado por unos cuantos compañeros de sábana que conseguirán hacer brotar de nuevo la alegría en ese deprimido espectro. Toda esta historia de la importancia de la amistad, tan beneficiosa para la salud, está vertida en versos octosílabos con unas rimas consonantes muy ripiosas que arrancan la sonrisa de los lectores más pequeños.

domingo, 15 de abril de 2012

Si la cosa funciona (Whatever Work). Woody Allen



El film tras la mente

Tal vez se sepa que Juan sin Credo ha visto la película Si la cosa funciona (Whatever Work), escrita y dirigida por Woody Allen e interpretada por Larry David y Evan Rachel Wood, en los papeles más relevantes.

Quizá se opine que esta producción cinematográfica norteamericana se puede encuadrar dentro de la comedia de situación y destaca esa interpelación constante de los actores hacia los espectadores, fracturándose, deliberadamente, la débil verosimilitud de una historia imposible que agudiza aún más el mecanismo de la comicidad.

Acaso el público piensa, al igual que Juan sin Credo, que todo ese mundo de relaciones con fines posibilistas y esas formas de ser tan contradictorias son una muestra del espíritu superficial norteamericano,  en una crisis permanente de valores, al solo ofrecer una única vía de escape, puramente pragmática, a las complicaciones personales que surgen cotidianamente, y que quedan encarnadas, magistralmente, en la piel del personaje principal, el misántropo Boris Yellnifoff (Larry David)



sábado, 14 de abril de 2012

Cumpleaños republicano


Hoy se celebra el octogésimo primer aniversario del advenimiento de la II República, mis tan fieles y únicos lectores, y no lo conmemoro porque sea especialmente mi ideología republicana que sueña la ansiada llegada de la III, redentora de todos los males del país; aunque sí pienso que la institución monárquica es un lujo caduco, más bien decimonónico, con un alto coste para las arcas del Estado y ya pueden decir los juancarlistas misa acerca de la tan cacareada y decisiva intervención en el 23-F, pues no es más que una patraña para justificar su apoltronamiento eterno en la cúspide de un poder más aparente que real.

El principal interés que me mueve a entonar una felicitación por el régimen republicano radica en que cuestiono muy firmemente el actual Estado de las Autonomías, parche ya ajado que se viene arrastrando de la Transición, y que, actualmente, es una de las causas principales de la sangría económica que está acabando con nuestro Estado del Bienestar, labrado con un gran esfuerzo por la generación de nuestros padres y abuelos.

martes, 10 de abril de 2012

Rapsodia. Pere Gimferrer


La reseña con saña

Se oye comentar a la gente del lugar que Juan sin Credo ha leído el último poemario de Pere Gimferrer, Rapsodia, publicado por la editorial Seix barral, en su colección Los tres mundos, en enero de 2011.

Dicen que a Juan sin Credo estos versos endecasílabos de rima blanca le han perfumado su memoria con toda la imaginería cultural y sensorialista, tan propia de los novísimos, gracias a esa ornamentación exuberante de sinestesias insólitas, metáforas arriesgadas y una toponimia italianizante que convierte a la poesía en un himno inefable de amor, tiempo y experiencia.


lunes, 9 de abril de 2012

Alberti no vende la venda de los ojos


¡¡Será posible la ridícula estupidez con la que nos vienen ahora, mis fieles y únicos lectores, estos ortodoxos del neoliberalismo más ultra!! Ya no se conforman con las reformas económicas sino también, en algunas localidades donde gobiernan con una abrumadora mayoría, se dedican a ejercer -como en sus mejores tiempos- de censores ideológicos.

Resulta que en un pueblo del levante almeriense han decidido cambiar el nombre del teatro que se llamaba Rafael Alberti. Bien es cierto que el autor apenas tuvo trascendencia como dramaturgo -dentro de sus obras de teatro apenas destacan, Noche de guerra en el Museo del Prado y El adefesio, esta última con un marcado acento de surrealismo- pero no esa la verdadera razón.

Dice el alcalde que Rafael Alberti no vende ¡Cómo que no vende!, ¡Menuda escusa más absurda! Que no nos engañen : la causa verdadera es porque Albertí fue comunista, aunque de salón, puesto que las veces que se manchó las manos trabajando este señor fue de pintura cuando realizaba sus cuadros.

Realmente, me molesta la capacidad de esos ediles de la Nueva España -crecida con el pelotazo del ladrillo en un desierto hostil y con los kilómetros y kilómetros de plástico en techo de invernaderos que cultivan productivamente el milagro transgénico del tomate kumato- capaces de imponer su rancia autoridad, otorgada por el rebaño de un puñado de votos, conseguidos a base de un clientelismo secular y un insignificante criterio de pensamiento político.

Sin embargo, no es este el problema sino que viene de más atrás. Los anteriores inquilinos de gobierno municipal, esos heterodoxos neoliberales de la rosa marchita que, erróneamente, se etiquetan de izquierda, gastaron la friolera de tres millones de euros en la construcción del controvertido teatro para dar servicio a 18.000 habitantes en el año 2007.

¿Esto sí que es un escándalo y no el cambio de nombre del edificio? ¿Cómo se puede permitir que un gobierno municipal maneje esas cifras de derroche? Es en estás cantidades de despilfarro donde se encuentra la verdadera sangría de la maltrecha economía de nuestro país.

Hasta que no se cambie la conciencia de estos manirrotos del caudal público, o no se legisle con unas fuertes sanciones privativas del ejercicio del cargo, aparte de las monetarias, ya puede este gobierno reformista privatizar, recortar o sanear,- eufemismo que emplean últimamente para referirse al desmantelamiento del Estado del Bienestar- para sanear el déficit que estrangula el fluido de capitales en esta España nuestra.











domingo, 8 de abril de 2012

El tiempo vuela. Kalandraka


La reseñilla que más brilla

En verdad, en verdad, digan lo que digan, Juan sin Credo ha leído a su primogénito, Francisco I, El Grande, Príncipe de los Ángeles, el álbum ilustrado titulado El tiempo vuela, cuyo texto pertenece a Joao Pedro Mésseder, las ilustraciones están dibujadas por la mano de Gémeo Luís y la traducción ha sido realizada por Xosé Ballesteros, publicado por la editorial Kalandraka, dentro de la colección libros para soñar, en enero de 2010 y que recibió una mención especial del jurado en el I Premio Internacional Compostela de Álbumes Ilustrados.

Como imaginarán, los tan únicos y fieles lectores de la amplia y nihilista obra del tan idolatrado e irredento crítico, el argumento de este álbum ilustrado es más bien básico:
 
• Ocurre que un niño reflexiona sobre el valor psicológico del tiempo, resultándole escaso porque siempre se queda con ganas de jugar. Desde esta visión infantil se pretende realizar una reflexión acerca del estado de ansiedad y agitación que coronan el concepto cumbre de la sociedad moderna. Una vida demasiado repleta de responsabilidades que nos hacen abandonar lo más importante: el momento lúdico que todos teníamos que dedicar diariamente a nuestros hijos; instantes irrepetibles que contienen una potente carga de capacidad creativa y que estrecha, firmemente, los lazos afectivos con los que más nos quieren y necesitan.

sábado, 7 de abril de 2012

Anibal vencedor. Goya

La De(x)posición permanente

Ahí le veis, mis más fieles y únicos lectores, majestuoso, con la mirada adusta, severa, imposibilitado emocionalmente para asimilar la enorme proeza bélica de su gesta heroica a las puertas de Roma. Inexplicablemente un error estratégico le privó, in extremis, de los laureles de la victoria.

¿Qué vuelco habría dado el rumbo de la Historia si Aníbal hubiese sitiado la Ciudad Eterna, obligándola a claudicar bajo su yugo? ¿Qué hubiese ocurrido con la trayectoria pictórica de Goya si llega a ganar la medalla de oro, otorgada a los participantes en el concurso de la Academia de Bellas Artes de Parma del año 1771 -institución prestigiosa bajo el patrocinio del duque Filippo di Borbone, sobrino de Carlos III- que fue finalmente concedida al italiano Paolo Borroni, discípulo de Bossi?

Probablemente nada sería igual a como se ha marcado en el vetusto cuentakilómetros de la Historia. Las bifurcaciones de los posibles sucesos se diluyen en las hipótesis de estos meandros insospechados que serpentean en la mente privilegiada de los eruditos. Con la victoria de Cartago, la idea de la Europa actual no tendría sentido y con el premio de Parma, Goya, que tan solo contaba con 25 años, habría terminado siendo un artista engreído, incapaz de convertirse en el genio que plasmó brillantemente en sus lienzos la sociedad final del Antiguo Régimen.

Parece ser que, según Jesús Urrea, el responsable de la identificación del cuadro allá por 1993, el cuadro solo recibió seis votos y una mención a causa, seguramente, de una efusiva carga simbólica, tanto en la alegoría del río Po, en su habitual iconografía propuesta por Cesare Ripa, como en el genio de majestuosas alas, que se presenta en una actitud teatral. No obstante, el esfuerzo compositivo es admirable, pudiéndose comprobar en la precisión clasicista de la anatomía de los personajes y en el tratamiento lumínico, que aporta una excelente armonía y un apunte técnico de primer orden para comprender con mayor exactitud su desarrollo como pintor en obras posteriores.

En definitiva, los admiradores de Goya estamos de enhorabuena porque durante seis años se va a poder contemplar en la Sala 35 esta obra primeriza, gracias a la cesión temporal de la Fundación Selgas-Fagalde, que completará la extraordinaria colección del autor existente en el Museo del Prado.

viernes, 6 de abril de 2012

El temblor del héroe. Álvaro Pombo


La reseña con saña

Se oye comentar a la gente del lugar que Juan sin Credo ha leído la última novela de Álvaro Pombo, El temblor del héroe, Premio Nadal 2012, publicada por la editorial Destino, en su colección Áncora y Delfín en febrero de 2012.

Dicen que a Juan sin Credo la prosa de Álvaro Pombo le produce cierta indigestión debido a esas prolijas introspecciones que realiza sobre sus personajes, convertidas en piedra angular de su discurso literario. Bien es cierto que ha sido capaz de crear una voz singular dentro del panorama narrativo español de los últimos tiempos, a pesar de que en esta última novela establece una red de relaciones personales bastante retorcidas. Este cruce de individualidades, tan imposible, resta verosimilitud a la historia que se salva gracias a una implacable fibra de elevado culturalismo, hilvanado en un pensamiento humanístico de carácter filosófico muy agudo.


jueves, 5 de abril de 2012

Valor de ley (True grit). Hermanos Coen

El film tras la mente

Tal vez se sepa que Juan sin Credo ha visto la película Valor de ley (True Grit), escrita y dirigida por Joe y Ethan Coen, basada en la novela de Charles Portis e interpretada por Jeff Bridges, Matt Damon y Haliee Steinfeld, entre los papeles más relevantes.

Quizá se opine que esta producción cinematográfica norteamericana se puede encuadrar dentro de la parodia del género western. Destaca el esmero de la ambientación del lejano oeste, tanto en vestuario como en decorados. También es reseñable la calidad de la fotografía sobre todo en planos largos, como el del disparo del Rangers, Matt Damon, sobre el cabecilla de los forajidos en una de las secuencias determinantes del film.

Acaso el público, al igual que Juan sin Credo, piensa que en esta visión disparatada de un género clásico por parte de los hermanos Cohen,-tratada con un eficaz sentido del humor, al presentarnos personajes tan antitéticos y a su vez tan arquetípicos de la forma de ser norteamericana, (que queda encarnada mediante el Sheriff tuerto y alcohólico, Jeff Bridges, más el elegante y metódico Rangers, Matt Damon, y sazonada con la figura de la legalista y testaruda Mattie Ross, Haliee Steinfeld)- muestra de una manera desenfadada el espíritu de una nación construida a golpe de balas y de leyes.

miércoles, 4 de abril de 2012

El horizonte. Patrick Modiano


La reseña con saña


Se oye comentar a la gente del lugar que Juan sin Credo ha leído la última novela de Patrick Modiano, El horizonte, traducida por María Teresa Gallego Urrutia y publicada por la editorial Anagrama en su colección Panorama de narrativas en septiembre del 2010.

Dicen que a Juan sin Credo esos personajes desvaídos y fantasmagóricos que pueblan las novelas de Modiano le producen angustia e incertidumbre. Además esos argumentos fragmentados en hilachas frágiles, abocan al lector hacia un profundo precipicio donde habita el pesimismo provocado por la pérdida de identidad en un laberinto inextricable de relaciones humanas superficiales.


Goya en Zaragoza. Museo Ibercaja


La De(x)posición permanente

La fantasía abandonada de la razón
 produce monstruos imposibles
GOYA

Tantos años ya juntos, -pagándoles religiosamente, mes a mes, un préstamo de usura, como son la mayoría de los hipotecarios- que me alegré de haber participado, aunque de una forma mínima pero sangrante, en la conservación de un patrimonio de incalculable valor económico e incontestable calidad artística.

Así fue como nos deslumbramos con la resplandeciente belleza de todo esa riqueza depositada en el Museo IberCaja Camón Aznar, muy cerca de la Plaza del Pilar de Zaragoza, en plena calle Mayor, frente a la iglesia de la Santa Cruz.

Pero no sólo el tesoro reluce por su contenido sino también por su aspecto externo. El Museo se ubica en la antigua vivienda levantada por el infanzón y mercader Jerónimo Cósida, edificada por el experimentado maestro de obras, el morisco Juan de Lanuza, que la construyó poco después de 1536. Destaca el patio renacentista que luce columnas anilladas, con fuste estriado, rematadas en capiteles de exquisitos motivos y figuras que fue remodelado, completamente, en el año 2008.

En cuanto a la colección, cobra capital relevancia la que se observa en la segunda planta del edificio, joya de la corona, ya que reúne no sólo algunas pinturas de Goya sino que también alberga sus cinco series de grabados. El paseante entra en una sala con una penumbra violácea que estimula su campo ocular en los dos niveles en el que están dispuestos los grabados, para que pueda disfrutar de una óptima contemplación de ese mundo rupturista y desgajado que aglutina los despojos de la ruina bélica, el folclore taurino y el anticipo del mundo irracional plasmado por el surrealismo, en las estampas de los Caprichos, los Desastres de la guerra, la Tauromaquia o los Disparates.

En definitiva, una parada que el viajero con una retina inteligente tiene que realizar para ensanchar su equipaje de cultura, amasada, en esta ocasión, gracias al mecenazgo conjunto del legado de José Camón Aznar e Ibercaja, entidad que encara el año de su fusión con Caja3 mostrando unas cifras de caída del 44,6 %, que se traduce en solo un beneficio de 57, 4 millones de euros.

martes, 3 de abril de 2012

El origen del mundo. Pierre Michon



La reseña con saña

Se oye comentar a la gente del lugar que Juan sin Credo ha leído la última novela de Pierre Michon El origen del mundo, traducida por María Teresa Gallego Urrutia y publicada por la editorial Anagrama en su colección Panorama de narrativas en enero del 2012.

Dicen que a Juan sin Credo esta breve novelita le ha parecido una muestra soberbia de una prosa que se entrelaza en la espesura de esos bosques tupidos de la región del Beune, además de ensalzar la voluptuosidad descarnada, repleta de madurez, de Yvonne a través de la mirada delirante y onírica de un joven maestro de escuela.